Comunicacion e Interactividad 2664

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Manuela Covaleda Murcia
Cada persona cuando entra  a su perfil tiene sus propias recomendaciones, a cada persona en especial le recomiendan contenido específico según sus intereses audiovisuales, además de recomendarte lo que está en el top 10, lo que se añadió recientemente, series aclamadas por la crítica, entre otros. 

En este caso se puede evidenciar un gran uso de la inteligencia artificial, ya que está nos conoce tan bien hasta el punto de recomendarnos series y películas que pueden ser de nuestro gusto. Esto lo hacen mediante el seguimiento a la información que nosotros dejamos en la plataforma y basándose en perfiles similares al nuestro. Al igual que interactuar con contenido en las redes sociales, o en la red, vamos creando nuestro propio perfil en Netflix. En la página principal de Netflix, cuando quieres investigar un poco más sobre tu privacidad, ellos te informan a cuál información tienen acceso, como por ejemplo: información que nosotros les damos (y con eso se enteran prácticamente de quienes somos), información  que recopilan automáticamente, información de socios, información que obtienen de otras fuentes. Y con está información proporcionan, administran, mejorar y personalizan diferentes estrategias de marketing, entre muchas otras cosas. Cuanto más utilicemos la plataforma, las recomendaciones serán más precisas. 

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El algoritmo de Netflix registra las búsquedas que se realizan de todos los contenidos disponibles y con esto, conocen los intereses del usuario. Se registran incluso los días de la semana en los que más se consumen productos de la plataforma o las horas que se invierten en visionado. Obviamente, los datos de los contenidos que consume un perfil sirven para realimentar el algoritmo de recomendaciones, que generará una lista de contenido similar al de tus últimas interacciones. 

El algoritmo de Netflix le permite saber en qué momento del día se conecta el consumidor, cuánto tiempo pasa en la plataforma, sabemos qué vio antes y después; incluso sabemos si lo hizo desde el ordenador, desde una tablet o el móvil. Tenemos mucha información», explicó Todd Yellin. Pero Netflix también recurre a nuestra información personales para poder crear contenido, mediante el machine learning, el cual permite que la plataforma identifique qué es lo que los consumidores están consumiendo (valga la redundancia) y entiendan cuál es la información importante y que producto se puede llevar a la pantalla grande. Sí, esa información les es útil para saber qué tipo de contenidos pueden crear, o al menos cuáles son los que más les convendrán en su plataforma. A través del análisis de rendimiento, preferencia y visualización de sus contenidos Netflix es capaz de predecir cuáles películas o series serán rentables y cuáles no lo serán antes de invertir en ellas (esto lo hacen mediante análisis de comportamiento del consumidor y visualizaciones).

Primero nos observan, luego diseñan los programas y por último nos ponen la temporada completa sobre la mesa. El objetivo es que nos entreguemos completamente al mundo audiovisual, que tengamos una reacción profunda, que sintamos el deseo por hablar de ese contenido y compartirlo, de está manera se da a entender que si TU no haz visto ese contenido, no estás en la “onda” . El hecho de que hablen de las series mucho y pronto se ha convertido en una necesidad para los propios creadores. Netflix toma la decisión de retomar un contenido basándose en los datos de las dos semanas previas al estreno, que observa en los ratings la satisfacción de una audiencia más ruidosa e insaciable que nunca (Carrión, 2021).

Nuestros datos hacen parte del mercado, nuestros datos se venden para alimentar el consumismo (aunque sea un consumo audiovisual), les permite saber que vamos a consumir con éxito y que vamos a disfrutar.