Figma, es una plataforma que permite el diseño de plataformas digitales (formato Apps) a través de trabajos colaborativos entre diferentes usuarios en simultáneo. Cada participante puede ver los cambios realizados por otros en tiempo real, lo que elimina la necesidad de intercambiar archivos o versiones. Esta interactividad no solo acelera el proceso de diseño, sino que también promueve una comunicación clara y eficiente entre los miembros del equipo. Igualmente, su uso y manejo es sencillo e intuitivo, permitiendo que personas sin experiencia en programación materialicen las ideas de sus interfaces.
Más allá de la evidente capacidad de interactuar en Figma creando de manera colectiva, es un espacio digital que, al ser una herramienta basada en la nube, es accesible desde cualquier dispositivo con conexión a Internet. Permitiéndonos romper con las distancias geográficas democratizando el proceso creativo y el intercambio de ideas, tal como lo plantean Aparici & Silva (2012).